domingo, 30 de mayo de 2010

El mundo en el que vivimos

Partamos de la idea de que la llamada sociedad occidental es el conjunto de personas que vive con el mayor bienestar material que jamás ha existido. Nunca antes de ahora ninguna sociedad ha tenido acceso a tantos bienes y servicios como los norteamericanos y europeos. Nosotros los españoles nos encontramos entre estos privilegiados.

Pero, ¿cuál es el origen de este bienestar?

Recientemente he estado leyendo algunos libros de Marvin Harris y lo explica en base a la ecología y a los cambios de modelo productivo que el crecimiento de la población ha obligado a adoptar a lo largo de la historia. Así explica que nuestros antepasados fueron recolectores y cazadores mientras hubo suficientes frutos y caza para todos. En el momento en el que la población creció tanto que estos recursos no eran suficientes para alimentar a todos, se vieron obligados a trabajar la tierra y a domesticar animales. La población siguió creciendo y cada vez se ocupaban más y más hábitats salvajes, hasta que alguién inventó una máquina que no requería tracción animal y que hacía el trabajo de muchos hombres. Se entró en la revolución industrial. Y se siguió creciendo, hasta los años setenta.

En ese momento se tropezó con que lo que había permitido fabricar y construir tantas cosas maravillosas desde el final de la segunda guerra mundial, el petroleo, tenía dueño y había que pagarlo.

Fue entonces cuando el dinero dejó de tener el respaldo del oro. A partir de entonces el dinero se convirtió en deuda, en deuda que, en teoría se podría devolver mientras se siguiera creciendo.

El Banco Central imprime billetes, se los presta a los bancos, a cambio de un interés. Los bancos nos lo presta a nosotros para abrir negocios, para comprar casas, coches, electrodomésticos, vacaciones, etc. Nosotros trabajamos y devolvemos el préstamo con intereses y, así es mientras se crece.

Pero, ¿qué significa crecer?

En el mundo en el que vivimos, crecer, significa aumentar la riqueza.

Pero, ¿cómo se mide la riqueza?

Con dinero, ¿pero el dinero no es deuda? Entonces, ¿la deuda es riqueza? ¿cuánto más deba más rico soy? Bienvenidos al primer sofismo de la economía moderna.

La riqueza siempre se ha medido con bienes materiales, con tierras, con objetos manufacturados, con metales preciosos, con ganado, con esclavos, con cosas tangibles. Actualmente se mide con apuntes contables, que no son otra cosa que anotaciones en una libreta. Eso sí, electrónica.

Todos sabemos que vivimos en un planeta finito que gira en torno al sol, ¿es posible el crecimiento económico infinito? Según los economista neo-liberales sí, ya que el ingenio humano crea bienes cada vez más sofisticados que no necesitan sostén material alguno. Ahí está la bolsa para demostrarlo, ¿no crea acaso la bolsa riqueza de la nada? Otra prueba es cada vez vivimos mejor, ¿es esto verdad?

Continuará ...

Presentación

Permítanme que me presente y que les cuente la intención de este blog.

Soy un alpujarreño almeriense, exiliado económico, viviendo en la costa, que acaba de cumplir 33 años, y viendo el cariz que está tomando la crisis, he sentido la necesidad de dar mi particular visión de como hemos llegado hasta aquí y de como me gustaría que salieramos.

Voy tratar temas de política, sin ser politólogo, de economía, sin ser economista, de psicología y neurociencia, sin que mis conocimientos vayan allá de lo que he aprendido de Eduard Punsset, de medioambiente, sin ser ecologista y ni tan siquiera biólogo. Quizá de lo único que no hable sea de ingeniería, que es lo que estudié y de lo que me gano la vida.

Parto de la base de que ignoro mucho más de lo que sé, por lo que muchas de mis opiniones, no serán más que eso, opiniones.